¿Sabes qué da sentido a tu vida? ¿Cuál es tu propósito en la vida? Para saber cuál es tu propósito en la vida tienes que poner el foco en lo único, poner el foco en lo más importante en tu vida.
Pon el foco en tu propósito en la vida
He leído hace poco un libro que me resulta muy inspirador y que me gustaría recomendarte. Se trata del libro de Gary Keller, «Lo único».
Creo que trata de forma muy amena y práctica la importancia de centrarte en tu vida hacia lo que consideras lo más importante, lo que da sentido a tu vida (tu propósito).
Poner el foco en tu propósito en la vida. Concentrarte en tu propósito de vida.
También lo que da sentido a tu trabajo, tu relación con tu familia, con tus amigos, o en todas aquellas facetas que para tí son claves en tu vida.
Este libro propone reflexionar sobre centrar tu intención y tu atención, «poner foco» en tu vida, (aspectos que ya hemos tratado en anteriores posts).
Busca lo único o como alcanzar tu propósito de vida
Me gustaría destacar algunas reflexiones e ideas interesantes de este libro sobre el sentido de la vida y el propósito en la vida:
Pon orden en tu vida
Es importante que busques “Lo único”, aquello que te acerca a lo que quieres conseguir en tu vida, en tu trabajo, en tus relaciones personales o en cualquier área de tu vida.
Es la mejor manera de conseguir aquello que quieres.
Para poder conseguirlo debes plantearte la siguiente cuestión: ¿Qué es lo único que puedo hacer en el día de hoy y gracias a lo cual todo lo demás va a ser más fácil o no tiene tanta relevancia?
Para poder tener éxito en lo que nos proponemos nuestra estrategia en la vida debe ser siempre la misma: simplificar.
Reduce el objeto de tu atención
Concentrar nuestra pensamiento en lo más importante para nosotros es una buena manera de conectar más estrechamente lo que hacemos con lo que deseamos conseguir.
Así, el obtener resultados extraordinarios viene determinado de forma directa por cuánto seamos capaces de reducir el objeto de nuestra atención.
Por tanto, aumentar nuestra concentración.
Simplificar es una estrategia sencilla que da frutos extraordinarios y que funciona.
Por eso funciona siempre, en cualquier parte y para cualquier asunto.
¿Por qué? Porque tiene únicamente un objetivo: acabar conduciéndote al punto clave.
Sólo avanzan en este mundo aquellos que se centran en una cosa cada vez. Og Mandino
Alcanza el éxito
Si te fijas en las historias de éxito de las personas famosas normalmente aparece una clara relación con lo que a estas personas les apasiona y tienen habilidad en hacer.
Esto es una característica que todos tenemos.
Todos tenemos pasiones y habilidades.
Pero en las personas que han triunfado de manera extraordinaria hay una emoción intensa o una habilidad aprendida que destaca.
Esa habilidad los define y los impulsa más que cualquier otra cosa.
LAS SEIS MENTIRAS QUE SE INTERPONEN ENTRE EL ÉXITO Y TÚ
1. Todas las actividades son igual de importantes
Estar muy atareado no significa ser muy productivo, o hacer una tarea con eficacia.
Es interesante reflexionar sobre el principio de Pareto, para darnos cuenta de que muchas veces con el 20% de nuestros esfuerzos conseguimos el 80% de nuestros resultados (y viceversa), como expone Richard Koch en su libro, «El principio del 80/20».
El principio del 80/20 afirma que una minoría de causas, contribuciones o esfuerzos suele provocar una mayoría de resultados, rendimientos o productos. Richard Koch
Resulta por tanto de vital importancia que identifiquemos cada uno de nosotros, cuál es ese 20% crítico sobre el que debemos concentrarnos, (ese 20% de clientes, 20% de actividades, 20% de recursos, etc).
Los resultados extraordinarios son fruto, de una manera desproporcionada, de muchas menos acciones de lo que la mayoría creemos.
2.La multitarea
Tenemos clara la importancia de tener un fin en mente y de identificar lo que es prioritario.
Además hemos constatado la relevancia de simplificar, de ser productivo, (no tanto de estar ocupado).
A partir de ahí, pensemos en el concepto, muy de moda hoy en día, de la multitarea.
¿Realmente las personas somos capaces de hacer dos o más cosas a la vez?
La verdad es que sólo podemos hacer dos cosas a la vez si son acciones que no requieren mucha concentración, como planchar y escuchar música o caminar y beber.
Lo difícil es centrarnos en varias cosas a la vez que impliquen un elevado nivel de atención. Lo más probable es que no lo hagas de forma eficaz.
Puedes hacer dos cosas a la vez, pero no puedes centrarte eficazmente en dos cosas al mismo tiempo.
La multitarea no es más que la oportunidad de fastidiar más de una cosa a la vez. Steve Uzzell
3. Hay que seguir una disciplina concreta
Lo crítico según el autor es que lleguemos a lo que cada uno de nosotros hemos definido como «lo único».
El camino que elegimos para ello depende de nosotros, no de seguir una disciplina impuesta desde fuera, sino lo que cada uno consideremos crucial para llegar a ese objetivo.
Podemos por tanto decir «no» a otras actividades que se esperan de nosotros, salirnos de esa disciplina definida por otros y seguir sólo nuestra propia disciplina.
El truco del éxito es escoger el hábito adecuado y hacer acopio de la suficiente disciplina para consolidarlo. Nada más.
4. La fuerza de voluntad está siempre disponible
Hemos deducido antes que no todas las acciones ni todos los pasos que damos para conseguir nuestras metas importan por igual.
Por tanto, no caigas en la trampa de ir tachando la lista en orden.
Nuestra fuerza de voluntad, nuestra energía diaria para realizar nuestrass «to do list» tiene un límite, seamos conscientes de ello.
El suministro diario de fuerza de voluntad es limitado, así que decide qué es lo que importa y resérvala para eso.
Observa cuál es el momento del día en que tienes la mayor cantidad de energía para poder llevar a cabo tus tareas o acciones principales, aquéllas donde prefieres concentrate.
5. Una vida en equilibrio
Para que puedas llevar a cabo tu propósito lo más imporante es que tu energía, tu combustible, esté a tope.
Es necesario para ello tener buena salud, energía y fuerza para tu cerebro, para ello hay que comer bien y de forma regular.
A veces, eso exige apartarse mucho del equilibrio respecto a otras cuestiones del trabajo, y solo dedicarles atención de tarde en tarde para contrapesar la situación.
6. Si piensas en «imposibles» te equivocas
Esta puede ser otra gran mentira.
El pensar en conseguir logros que a priori pueden parecen imposibles es el paso previo a alcanzar resultados extraoridinarios.
El éxito exige acción, y la acción exige reflexión.
Pero hay una pega: las únicas acciones que sirven de trampolín para un gran éxito son aquellas en las que previamente se ha pensado «a lo grande». Hitchcock, Picasso, Gandhi y otros que «vieron las cosas de manera distinta» y que lograron transformar el mundo que conocemos.
La cuestión es que no escogieron entre las opciones disponibles, sino que imaginaron unos resultados que nadie había concebido antes.
Como nos recuerda ese anuncio: «Las personas que están lo suficientemente locas para creer que pueden cambiar el mundo son las únicas que pueden hacerlo».
No tengas miedo al fracaso
El fracaso es sólo parte de la experiencia, del aprendizaje.
Forma parte del camino hacia unos resultados extraordinarios tanto como el éxito.
Adopta una mentalidad de crecimiento y no tengas miedo de adónde pueda llevarte.
Tu gran idea única es tu propósito, y tu pequeña idea única es la prioridad de la acción que emprendes para conseguirlo
La gente más productiva parte del propósito y lo utiliza como si de una brújula se tratase.
Dejan que el propósito sea la fuerza que los guíe para determinar la prioridad que empuja sus actos.
Este es el camino más recto hacia unos resultados extraordinarios.
¿Qué es para tí «lo único» donde enfocarte? ¿Tienes puesta ahí tu intención y tu atención en tu día a día?
¿Sabes cuál es tu propósito en la vida?
