El coaching es un proceso de acompañamiento individualizado que ayuda a la persona a liberar su talento y potencial, maximizando la efectividad de actividades llevando a cabo los planes de acción que establece para conseguir sus objetivos.
¿Qué es y qué no es el coaching?
¿Cuáles son las etapas de un proceso de coaching?
- Reflexión: el pupilo, a través de las preguntas que formula el coach va analizando la situación en la que se encuentra, reflexionando sobre sus propias motivaciones, valores e ilusiones. En esta etapa se detectan también las fortalezas y competencias en las que se apoyará para conseguir sus objetivos.
- Descubrimiento: el pupilo en este punto identifica los sueños que le motivan y a partir de esa visión define los objetivos sobre los que quiere trabajar.
- Plan de acción: el pupilo decide en la sesiones de desarrollo con el coach, cómo quiere conseguir esos objetivos, qué acciones quiere llevar a cabo y el compromiso que quiere adquirir consigo mismo para conseguirlos.
- Seguimiento: el pupilo toma conciencia de su evolución, en las sesiones con el coach, de los obstáculos a los que se enfrenta y cómo superarlos, y evalúa los resultados que va consiguiendo con el proceso.
¿Cuáles son las diferencias entre el coaching y otras disciplinas?
Mentoring
Mentoring proviene de Mentor, el que fuera amigo, maestro y consejero fiel de Ulises en La Odisea. El mentor asesora, forma y capacita al pupilo, incluso en ocasiones transmite sus conocimientos, adquiridos en su vida o experiencia profesional.
El mentor suele ser, por tanto, una persona especializada, con grandes conocimientos o práctica de aquello que transmite. Ahí radica la diferencia con el coaching, ya que el coah no enseña al pupilo, ni pretende ser su modelo de comportamiento o referencia.
Consultoría o asesoría
En la consultoria y asesoría se ayuda a la persona y/o la organización, a través de un diagnóstico previo, a la búsqueda de soluciones a un problema o a mejorar la situación actual implantando acciones.
El consultor por tanto ha de ser un experto en la cuestión para detectar fallos y proponer soluciones e, incluso, implementar las medidas oportunas. El coach no es un consultor, por lo que no propone las soluciones ni decide sobre las acciones a llevar a cabo.
Formación
En la formación existe una transmisión de conocimientos o un aprendizaje basado en la explicación de técnicas o desarrollo de habilidades por parte del profesor o formador y la práctica por parte del alumno.
Pero el coach no es un profesor, ni dice lo que hay que hacer o cómo hacerlo.
El único punto que tienen en común ambas disciplinas es el desarrollo de la persona, pero las técnicas son diferentes. De hecho, pueden combinarse en programas de desarrollo acciones formativas con procesos de coaching.
Terapia
Además, hay que diferenciar el coaching de una terapia. La terapia es necesaria cuando existe un trastorno y hay que curar esa patología.
El coaching nunca debe intentar abordar esa situación, sino que debe derivarla para que sea tratada por un profesional adecuado (del ámbito de la psicología o psiquiatría).
Gracias Noelia por la explicación tan clara que haces de términos que muchas veces se confunden entre sí, y que pueden llegar a producir equívocos entre lo que esperan las personas y lo que realmente «el profesional» les puede aportar.
Gracias a tí, María José, por tu comentario, un abrazo